Macetas Colgantes de Latas Vacías

En esta tarea creativa de hoy, vamos a aprender a dar una segunda vida a las latas, para diseñar un jardín vertical muy particular.

Si te apasiona crear objetos con los desechos, y además deseas contribuir con tu granito de arena en la reconstrucción del planeta, para devolver equilibrio al medio ambiente, este tutorial de reciclaje creativo ayudará a que veas más logros en tu trayectoria como consumidor responsable y ecológico.

La lata, ese pequeño envase metálico, es un ejemplo sobresaliente de un material ampliamente reciclable. Su durabilidad y versatilidad lo convierten en un recurso valioso en el mundo del reciclaje creativo y el cuidado del medio ambiente.

Las macetas colgantes lucen bonitas en cualquier rincón de un hogar, negocio o lugar de trabajo. En este caso, se tratan de macetas colgantes obtenidas como resultado de una segunda vida de productos de consumo.

¡Quédate y te lo explico en los siguientes pasos!

Antes de iniciar este trabajo, reúne los materiales que vas a necesitar para ello. Debes tener a mano los siguientes útiles:

• Latas vacías: el tamaño de la lata lo decides tú, según el espacio que dispones para colocar tu diseño final y la tipología de latas que puedes encontrar en tu despensa a las que aportarles una segunda vida.
• Pintura: puedes darle color a las macetas con algún tipo de pintura sobrante que encuentres en tu casa o bien en caso de que quieras adquirir una nueva, puedes optar por pintura acrílica resistente al agua, si cuelgas las macetas en el exterior.
• Cuerdas o cadenas: para colgar las macetas.
• Papel o tiras decorativas: si te gusta ser más atrevido en tus diseños, anímate a cortar tiras de papel y pegarlas.
• Brochas: necesitas brochas o pinceles, en distintos tamaños si además deseas realizar algún dibujo en el color de base.
• Plantas: selecciona las plantas que te gusten y se adapten al espacio que van a tener.
• Ganchos o soportes: para colgar las macetas.

Mira en tu despensa y selecciona las latas que van a quedar perfectas en el diseño que estás imaginando. Si las latas de comida están almacenadas para ser recicladas, pues genial, porque antes podrás comenzar tu tarea.

Asegúrate de retirar cualquier adhesivo o residuos de las latas. Limpia y seca minuciosamente cada envase. En algunos casos se lija un poco la superficie de las latas, pues ayuda a que la pintura se adhiera mejor más tarde. Si no lijas las latas probablemente necesites varias capas de pintura si deseas cubrirlas de color al completo.

Al seleccionar las latas, te quedarán bonitas las macetas de diferentes tamaños, aunque también puedes usar todas las latas del mismo formato y dimensión, en ambos casos tus macetas colgantes recicladas relucirán y decorarán con colorido el rincón donde las coloques.

En este paso vamos a decorar las latas con pintura. Aquí puedes dejarte llevar por tu creatividad y aportar tu estilo personal a los diseños, tanto en grosor de capas de pintura que decidas darle, como en el color de base, o en los dibujos posteriores.

Acuérdate de dejar secar cada capa antes de aplicar la siguiente, y sobre todo la capa previa a la aplicación del dibujo que realices. Tienes otra opción respecto al diseño pintado, es dejar el dibujo para llevarlo a cabo al final, antes de colocar las plantas.

Una vez que la pintura esté seca, perfora agujeros en las latas para facilitar el paso del agua.

Puedes llevar a cabo pequeños agujeros en la base de cada lata, haciendo uso de un taladro para este material o bien con el empleo de un clavo y un martillo.

Ahora es el momento de preparar las cuerdas o cadenas que utilizarás para colgar las macetas. Mide la distancia deseada entre cada lata y corta cuerdas o cadenas de longitud suficiente. Asegúrate de tener en cuenta la altura de la pared donde colgarás las macetas y deja un poco de holgura para ajustar la altura una vez colgadas.

Puedes realizar algún agujero lateral en las latas, para pasar las cuerdas o cadenas por el mismo, y continuar el recorrido con agujeros de la base. También puedes reforzar la con las cuerdas

Ata firmemente las cuerdas o cadenas alrededor del cuello de cada lata. Puedes hacer un nudo doble o utilizar un gancho en caso de que prefieras una opción más desmontable. Asegúrate de que las cuerdas o cadenas estén bien sujetas para evitar que las macetas se caigan.

Coge tiras de papel de diferentes colores, también puedes añadirle tiras de papel de revistas o periódicos viejos. Si prefieres hacer otros formatos con ellas, en vez de tiras puedes recortar figuras de animales, flores, u otras formas.

Pega las tiras o figuras de papel a las latas una vez que la pintura está seca, tanto de la base como de los dibujos que hayas creado en su caso.

Coloca las plantas con la tierra adecuada en el interior de las latas. Deja un espacio para el crecimiento de las raíces. Asegúrate de presionar bien la tierra alrededor de la planta, para que pueda desarrollar sus funciones de manera óptima.

Si prefieres no tener la planta directamente en la lata, también puedes colocar dentro una maceta, de modo que la lata sirve de soporte decorativo pero no es la cuna directa de la planta.

Busca el mejor rincón para que tu diseño de reciclaje pueda lucir.

Cuando tengas las macetas listas, busca los ganchos, clavos o soportes de macetas colgantes para colgar las macetas por medio de las cuerdas o cadenas a la pared o el techo.

Confiere tu toque creativo al distribuir de manera homogénea las macetas, y así lograr una estética personal.

Con las macetas colgantes podemos diseñar jardines verticales, también en espacios urbanos y pequeños. Todo ello nos ayuda a regenerar el medio ambiente, impulsando además la biodiversidad de especies. ¡Te felicito por tu trabajo! Has logrado mermar residuos y reutilizar objetos con arte creativo. Espero que lo disfrutes y que tus plantas se mantengan saludables.

No te pierdas un bonito reciclaje de cartón que te recomiendo: Organizador de Escritorio con Cartón.

Recuerda que la conciencia ecológica nos lleva a tomar decisiones informadas sobre nuestros hábitos de consumo. A medida que nos educamos sobre los impactos ambientales de nuestras elecciones, podemos tomar decisiones más conscientes, como optar por productos con menos embalaje o fabricados de manera sostenible.